jueves, 4 de octubre de 2007
¡Renfee! ¿Renfe?
¡Cuanto tiempo! ¿que tal todos? ¿bien? pues me alegro :P. Hace mucho que no me paso por aquí, pero todo tiene su explicación. Poco después del fallecimiento de James Ridgey jr me fui una semana de vacaciones a La Manga, un lujo, calor, playa, helados, mi novia, vamos, lo mejor del mundo. Luego a la vuelta de vacaciones, me he encontrado con un panorama bastante estresante: en la universidad no me han dado el grupo que he pedido y tengo que andar cambiando de grupo, he estado toda esta semana mañana y tarde en la universidad, llegando a casa a las mil, mas muerto que vivo y aguantando los retrasos del cercanías de costumbre.
Hoy voy a contar mis vivencias en el cercanías de renfe. Todos sabemos que los trenes se retrasan, que los conductores paran los trenes ilegalmente, que hay trenes que directamente no pasan... etc... es el pan de cada día, pero para que algo de lo que me ha pasado en el cercanías merezca la pena ser contado en una entrada, tiene que ser tela. Yo, como soy friki (como ya admití en un post) y como me gusta la fantasía épica, voy a relatar lo acontecido en forma de historieta satírico-fantástica, de ahí el título parecido al de cierto libro de Prachett (mi narración no estará a la altura ni de cerca de la gran calidad del Maestro Prachett, pero espero que se me permita la licencia del título).
Anme soy yo, algunos diréis "noo, es un sobrenombreee", pero me conocéis por mis post como Anme, así que soy Anme. Tras un día largo en la "Universidad Bien Visible" de Leganés (de 12 a 6 ná menos, con un descanso para comer bastante escaso) me disponía a emprender el ya de por sí largo camino de vuelta a casa, la cosa fue normal, hasta que llegué a las tierras de Atocha el reino Donde Todo Pasa Tarde.
Llegué ilusionado, aún faltaban 5 minutos para que mi tren llegara a su hora, lo que viene a decir que me quedaban poco más de 10 minutos de espera. Pero como pasa muchas veces el tren no pasa... y nadie dice nada... la voz de Dios de Atocha sólo decía, de cuando en cuando "les recordamos que según normativa legal vigente no está permitido fumar en el recinto de la estación", pero Atocha estaba llena de herejes. Todo el mundo fumaba. Por eso los Vehículos Sagrados no llegaban a su hora, tenían miedo de los infieles. El pobre Dios de Atocha estaba tan ocupado intentando meter este precepto a sus fieles que no era capaz de decirme por qué mi tren llegaba tarde.
Pero el Profeta Luminoso (que no habla, pero escribe) dijo (15 minutos después de la hora marcada para mi tren) "COLMENAR 1 MINUTO" ¡Aleluya!, un vehículo sagrado viene a recogerme para alejarme de los Palitos Asesinos y Humeantes de los herejees :D. y efectivamente, un tren con el rótulo de "COLMENAR" bien grande y brillante se paró a mis pies y me dejó entrar. Me senté y me puse a leer como tengo por costumbre.
Otro retraso normal, pensé yo, pero la cosa no acaba ahí, de hecho la cosa empieza ahí. Recorrido normal hasta llegar al Tempo de Chamartín. El tren estuvo estacionado más tiempo del normal (vamos, mas de 10 minutos) y hubo mucho trajín de fieles que entraban y salían, yo ni caso, estaba leyendo. Y por fin el vehículo sagrado se fue. Pero tanto infiel en Atocha lo tenían trastornado, pobre, he hizo una para en Ramón y Cajal.
Dolido por el maltrato del Dios, y furioso me bajé del tren a toda velocidad, pero el Vehículo Sagrado estaba en trance para recuperarse de tanto infiel, y estaba bastante más elevado sobre el andén de lo normal. El tren en su trance no pudo avisarme a tiempo de la existencia del Abismo, y caí al vacío. Para mi cerebro la caída era de 20 pisos, pero para mi cuerpo era de apenas 1 metro. Como mi cerebro y mi cuerpo no se pusieron deacuerdo, mi pierna izquierda tomó la iniciativa y paró todo el golpe contra el fondo del Abismo sacrificando al pobre Menisco en el proceso. El resultado es que me mantuve el pie, y cojeando fui a la taquilla para pedir el Gran Libro de Comunicación Con los Dioses.
El Guardián del libro tiene mucho celo a la hora de dejar El Gran Libro a la gente, no se sabe quien puede ser infiel. Al principio no quiso dármelo, pero convoqué al Poder Supremo, diciendo las Palabras Sagradas: "o me das el libro, o llamo a la policía para que te obligue a dármelo" y el Guardián vio que era merecedor de Comunicarme con los Dioses. Cuando escribía mis súplicas a los Dioses, me percaté de la existencia de una casilla desconocida en los Libros hasta ahora, dicha casilla rezaba: "si quiere que su opinión cuente para Renfe a la hora de elaborar estudios de calidad de servicio, marque esta casilla" por supuesto la marqué. ¡El Dios tendrá en cuenta mis rezos!
Después de escribir en el Gran Libro obtuve mi Resguardo Sagrado sellado con la La Fecha
, y me dirigí al andén otra vez para coger un Vehículo Sagrado a Chamartín, y poder llegar, al fin a mi destino. Pero la voz de Dios tronó: "el servicio en la estación de Pitis está interrumpido por un período de tiempo indefinido, ya les avisaremos cuando pasen trenes".
Despechado por el desprecio del Dios, cojeando, me dirigí al mini-templo del Dios Bus que no tardó en aparecer y me dejó en casa poco más de una hora más tarde de lo esperado.
¡Dios de Atocha!¡Yooo, Anme, te repudio de por vidaaa!¡Ni eres capaz de hacer que los infieles no usen los Palitos Asesinos Humeantes!¡No vales nada!¡ Tus vehículos sagrados son viejos e inútiles!¡Y el camino a Casa está plagado de Paradas Ilegales!¡Que Madrid te destruya, y te posea a partir de ahora!
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1 comentario:
Al menos el humor no te lo pueden quitar, aun cuando sí que puedan (y de hecho lo hacen) despreciar al usuario de Cercanías. Total para un misero billete que pagamos bien pueden ignorarnos, cosa que no se atreven a hacerles a los de largo recorrido que se dejan su buen dinero en los suyos...
Por cosas como esta yo rehuyo el Cercanías como si tuviera la peste. Retrasos día sí día también, trenes que no aparecen, nicotinómanos dándole al vicio donde y cuando quieren (que suele ser en todos lados y en todo momento), malos modos por parte de los empleados, paradas injustificadas y sin avisos ni información durante minutos eternos en estaciones o incluso entre medias, y un larguísimo etc.
Y luego dicen que la gente no usa el transporte público, es que conociéndose el panorama cualquiera que pueda echar mano del coche no traga con tanta tontería. El Cercanías empeora año a año por imposible que parezca tal cosa, y al paso que va acabará convirtiéndose más en un estorbo que otra cosa. A ver si se lo toman más en serio y empiezan a tener un poco en cuenta a los usuarios, que si siguen usándolo más que por gusto es por fuerza mayor, y meten a gente que realmente sepa lo que hace y se tome en serio su trabajo y no como la pandilla de negados y amargados que hay actualmente, que se dan más prisa en apuntarse a las huelgas y parones ilegales que los chavales de instituto a un botellón XD
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